¿Cuándo debo renovar la web de mi despacho de abogados? ¿Te lo has preguntado? Seguramente has oído por ahí que las webs, como los móviles, cuando les caen un par de años ya no están a la última. No va desencaminado. A lo largo de este post te lo voy a explicar. En cinco minutos serás un experto en ciclo de vida de una página web.

¿Ya habías tenido la idea de crear un sitio web para tu despacho de abogados hace varios años, pero hoy en día ya no está actualizada, pierde visibilidad o genera muchas menos visitas que antes?

¿Cuándo debo renovar la web de mi despacho de abogados?

Cuando noto que tengo menos llamadas. Menos mensajes. Menos emails. Cuando hay una caída en el tráfico web cada semana.

Un rediseño para una nueva estrategia digital

Nada se pierde sino que se transforma. Y es que es posible transformar tu antigua página web para crear una nueva y empezar de nuevo. Se conoce como rediseño del sitio web. Se trata de dar una nueva estética, diseño, funcionalidades, fortalecer sus características para aparecer en Google, etc.

El rediseño del sitio también es sinónimo de una nueva estrategia porque dependiendo de los objetivos que se marquen para este nuevo portal, habrá que adaptar la apariencia, las palabras clave, etc.

Buscamos aparecer en Google antes que nuestra competencia. Por supuesto, también queremos una web más rápida, más estética, con más prestaciones, pero la prioridad es aparecer mejor colocados en Google. De esto ya hablé más en este otro artículo.

¿Por qué replantear un nuevo diseño para la web del despacho?

Estamos hablando de diseñar una nueva web cuando tu despacho de abogados ya tiene un sitio web que no está dando el rendimiento esperado. Este portal es generalmente un sitio de presentación que muestra tu actividad, áreas de especialidad, etc. Sin embargo, cuando éste aparece con una imagen envejecida, simplemente necesitas actualizarte con un nuevo diseño.

Una web nueva —bien trabajada— aparece en Google antes que las de los demás despachos. La cuestión estética es importante, pero la prioridad tiene que ser hacer clientes con la web
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Pero no solo diseño, sino prestaciones que traen más posibles clientes al despacho: características y trabajo de SEO. Darle a tu web una segunda vida será beneficioso de muchas maneras. Un sitio web también es una oportunidad para navegar con las nuevas tendencias web y destacarse de la competencia. En definitiva, de aparecer ante esa persona que busca abogado antes que los demás despachos.

¿Por qué una nueva web?

Ya sabes que es necesario hacer una web a tu imagen para tu despacho de abogados en varios casos. Es posible que descubras que ya no refleja realmente tu identidad y los valores que quieres transmitir. Si tienes mucho tráfico, pero no una buena imagen, de poco servirá.

En segundo lugar, —por importancia el primero—, cuando ya no eres visible en los primeros resultados de los motores de búsqueda y tu web se aleja en los resultados de búsqueda.

Quieres digitalizar tus servicios legales para facilitar los intercambios con los clientes y simplificar tareas administrativas.

También debes saber que los algoritmos de los motores de búsqueda cambian con mucha frecuencia y que, para permanecer al día, también debes cumplir con estos cambios.

Te das cuenta de que no puedes consultar tu web en otro lugar que no sea en tu ordenador, por ejemplo funciona mal en móviles o tablets.

¿Cómo debe ser el proceso para tu nueva web?

Si bien un trabajo de diseño nuevo resulta desafiante, es menos aterrador cuando una agencia especialista te apoya, te ayuda en la toma de decisiones.

El punto de partida es, en primera instancia, analizar la web actual. Construir una auditoría del contenido del sitio, de la empresa y determinar las páginas estratégicas. Releer los textos ya escritos para saber si los textos están suficientemente provistos de información, determinar las páginas que generan más tráfico con el objetivo de mejorarlas, plantear qué nuevas secciones nos pueden traer nuevos clientes objetivo, etc.

También debemos preguntarnos el objetivo de la nueva web: ¿deseo de un rediseño gráfico, es decir, de modernizar la carta gráfica? ¿Integrando nuevas funcionalidades como configurar la venta online de servicios legales? ¿Optar a nuevos clientes para mi cartera?

Frente a estas preguntas, necesitas conocer a tu cliente habitual y a tu cliente objetivo. Precisas un retrato robot: un buyer persona. Si podemos entender lo que busca, podemos diseñar una web capaz de atraer a estas personas. 

Para un despacho de abogados, para su web, es esencial trabajar determinando también la estructura de árbol, es decir, los diferentes niveles de las páginas. Áreas de práctica, conceptos de cada área, formas en que los usuarios buscan esas áreas, etc. Si no lo planteas desde el punto de vista del usuario, estás creando una web para otros abogados, no para clientes.

Después de haber desarrollado toda la nueva estrategia digital de la nueva web, llega la fase de desarrollo. Trabajar para satisfacer las nuevas necesidades de los buscadores nos requiere incorporar un diseño responsivo, útil para consultar el sitio en el móvil. Una web con tiempos de carga casi efímeros, con imágenes optimizadas a los últimos formatos, textos que generen interacción al usuario, etc.

También será necesario valorar —en las secciones que funcionen bien—, la redirección de cada página web desde el sitio web antiguo al nuevo para que los motores de búsqueda entiendan que sigue siendo el mismo sitio, ¡pero mejor!

Hay que valorar sus palabras clave, para mantener o mejorar la clasificación de las mismas en los motores de búsqueda. Por lo tanto, las páginas se optimizan de acuerdo con las solicitudes de los usuarios para aumentar sus posibilidades de aparecer en la primera posición. Supón que tienes un escaparate por el que no pasa nadie. Lo que el trabajo en SEO hace a la web es como quitar tu escaparate de esa calle oscura y ponerlo en la calle por la que pasa la gente que compra esos artículos que tú tienes expuestos.

Conclusión ¿Cuándo debo renovar la web de mi despacho de abogados?

Cuando sientas que tu web no te reporta clientes. Se puede y se debe referenciar a una realidad más compleja, pero la de los clientes es esencial. Hay muchos despachos —demasiados— haciendo webs para «que no se diga que no tenemos web», pero eso no es suficiente. Una web a la que no llega tráfico es como comprar una bicicleta nueva y jamás utilizarla. No te compras una bicicleta para que no digan que no tienes, te la compras para usarla.

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