Modernizar la profesión y conectarla con los retos del siglo XXI, está en el ánimo de cualquier profesional que quiera insuflar vida renovada al ejercicio de la abogacía. Pero no solo se trata de avanzar adelante en todo lo que ello supone: aplicación de nuevas tecnologías, incardinar nuevos campos del Derecho a la práctica de los despachos, etc. sino también de romper con costumbres atávicas en el sector, para que esa ruptura nos devuelva abogados y abogadas mejor considerados socialmente; más valorados por el propio sector jurídico —muy precarizado—, dignificar turnos de oficio, acoger al nuevo abogado/a con retribuciones más justas, etc.

A esa tarea —tan titánica como necesaria—, se ha dado Borja Luján Lago, abogado con quien he tenido la suerte de conectar estos días. Junto con un equipo de colaboradores, lidera Ahora Abogacía, una plataforma comprometida con los desafíos de la profesión y con la necesidad de cambio adyacente a ellos. He hablado con Borja sobre esta iniciativa, sobre el momento actual de la abogacía y retos a afrontar.

Si, como yo, crees en la mejora constante, esta entrevista es para ti. Tengo la sensación de que en la esfera profesional no existen posiciones estáticas: o evolución, o involución.

No cabe duda que la abogacía es un sector —todo el legal, de hecho—, que está sufriendo grandes transformaciones. Usted, forma parte al frente de un proyecto que se ha llamado Ahora Abogacía, que viene a poner en el foco los desafíos de profesión y los cambios que serían preciso abordar: ¿qué nos puede contar de este proyecto? ¿Cómo surge la idea? ¿Quién integra el equipo?


Ahora Abogacía es un proyecto que nace de la unión de un grupo de abogados y juristas de toda España, los cuales, me atrevería a decir, líderes en su sector, que tienen una especial preocupación no solo en las grandes transformaciones que ya tenemos en nuestro día a día sino, sobre todo, en la preocupante degeneración de la figura del Abogado en la sociedad actual, siendo, esto último, el principal hilo conductor para la unión de esfuerzos. Todos los que integramos el proyecto, tenemos dos premisas fundamentales: la primera, que todos tenemos una especial preocupación por el presente y futuro de la abogacía y, la segunda, que todos estamos orgullosos de nuestra profesión. 

ahora abogacía cambio en la abogacía

¿Cuáles son los frentes —más acuciantes— que hay que abordar en la abogacía actual en primer lugar?

Lo primero e inmediato es recuperar la posición del abogado en la esfera jurídica, no solo somos un operador jurídico, sino que somos la base fundamental del sistema, aunque a veces se nos trata como si fuéramos el “último mono”, permítanme la expresión.

En segundo lugar, son muchos los asuntos a los que tenemos que prestar atención:

  • Debemos dignificar el turno de oficio.
  • Establecer mecanismo para la conciliación familiar y laboral del abogado y que la misma sea respetada por los Tribunales.
  • Prestar atención y ser motor de la transformación digital y la digitalización de la justicia, al igual que de la transformación normativa de nuestra sociedad.
  • Tenemos que apoyar a los jóvenes abogados para que tengan la mejor formación e impedir la precarización laboral,
  • Además, debemos instar a los Colegios profesionales a que sean cercanos y transparentes con sus colegiados.

En definitiva, estos son, entre otros muchos, los aspectos que, sin lugar a la duda, requieren nuestra atención y, por ello, debemos trabajar para dar soluciones a todos y cada uno de ellos.

¿Qué objetivos se marca Ahora Abogacía a corto, medio y largo plazo?

A corto plazo, nuestro objetivo es movilizar una amplia base social de abogados que se preocupen por el futuro de la profesión. Estamos desarrollando numerosas presentaciones, reuniones, encuentros en universidades… Nuestro objetivo es llegar directamente a 20.000 abogados madrileños en los próximos 6 meses con este mensaje de cambio y renovación.

A medio plazo, tenemos como objetivo seguir recopilando ideas para construir un programa de propuestas que podamos trasladar a los representantes institucionales de la abogacía. En los próximos meses se celebrarán elecciones al Colegio de Abogados de Madrid y queremos influir en el debate y en las propuestas de los candidatos para que el proceso sea útil y contribuya al objetivo de modernizar la profesión y conectarla con los retos del siglo XXI.

Seguimos recopilando ideas para construir un programa de propuestas que podamos trasladar a los representantes institucionales de la abogacía

A largo plazo, nuestro objetivo es cumplir con los principios constitucionales del movimiento, proponiendo ideas, creando proyectos, interactuando con los poderes públicos y siendo motores del cambio que está por venir. Creo que nuestro manifiesto es claro para ello y necesitamos convertirnos en un movimiento nacional que reúna todas las inquietudes de la profesión.

Ahora Abogacia entrevistamos aBorja Lujan

¿Cuáles son los principales obstáculos a los que se enfrentan los nuevos abogados en la época actual?

Hay que hablar claro. Los jóvenes abogados se enfrentan a prácticas imposibles y precarizadas, incluso, en algún caso, han llegado a tener que pagar para ejercer la profesión. Nosotros queremos dotar de respeto a todos los abogados. Paralelamente a lo anterior, los jóvenes se enfrentan a las nuevas tecnologías, a la necesidad de la continua formación, entre otras muchas cosas. Por ello, un pilar fundamental en nuestro movimiento es la formación. Queremos que los abogados se formen en la excelencia.

¿Qué eventos e hitos en el calendario debemos subrayar relacionados con la actividad de la plataforma Ahora Abogacía?

En los próximos días vamos a solicitar a la RAE que cambie la tercera acepción de la definición de abogado, la cual lamentablemente nos define como persona habladora, enredadora y parlanchina, lo que a nuestro criterio ahonda en el descrédito de nuestra profesión y nuestra figura.

Vamos a solicitar a la RAE que cambie la tercera acepción de la definición de abogado, que lamentablemente nos define como persona habladora, enredadora y parlanchina, lo que a nuestro criterio ahonda en el descrédito de nuestra profesión y nuestra figura.

Esto es sólo un ejemplo del tipo de iniciativas en las que estamos trabajando. Lo bueno está por venir. Vamos a continuar movilizándonos y consiguiendo apoyos, necesitamos que todos los que quieran colaborar nos expresen sus preocupaciones y sus propuestas. A partir de aquí, trataremos de conseguir mediante los medios que estén a nuestro alcance la implantación de las medidas de mejora en la abogacía española. Trataremos de reunirnos con todas las instituciones que tienen una función relevante en el sector jurídico para, como decíamos en el inicio de la entrevista, cambiar nuestra profesión y la concepción del abogado en la sociedad.

Por último, si me permite, quiero agradecerle esta entrevista, la cual ayuda a dar visibilidad a un movimiento de reciente creación pero de importancia vital no solo para nuestros compañeros sino para el grueso de nuestra sociedad.

Nadie puede sabotear mejor que el que está dentro. Son los abogados quienes pueden dinamitar la profesión o, por el contrario, llevarla a cotas de excelencia. En esto tiene mucho que ver la iniciativa. Ser proactivos en el apoyo y adhesión a una plataforma como Ahora Abogacía puede suponer un cambio de paradigma, del abogado frustrado al abogado que ya no se conforma con la situación actual y es activista de una profesión mejor. Por sí mismo y por todos.

Como en toda iniciativa no lucrativa, solo resta agradecer a aquellas personas que tachan tiempo de sus agendas, sus familias y su tiempo libre, para dedicarlo a una plataforma de cuyos avances y logros disfrutarán todos.